Carmen es una historia de amor, pasión y celos mundialmente conocida, y que se localiza en Sevilla. Escrita por el francés Prosper Merimé en 1845, fue catapultada a la fama gracias a la adaptación a la ópera hecha por Bizet. Su estreno, el 3 de marzo de 1875 en el Opéra-Comique de París, fue un fracaso. Sin embargo, sentó las bases para un nuevo tipo de ópera y ha pasado a ser una de las óperas francesas más reconocidas y representadas en todo el mundo.
La historia de esta novela está ambientada en Sevilla, a principios del siglo XIX, y está protagonizada por Carmen, una bella gitana con un gran temperamento que trabajaba en la Real Fábrica de Tabacos de Sevilla, y por Don José, el ex militar al que enamora hasta llevarlo a la locura.
Algunos de los hechos de esta mítica ópera ocurren en los lugares más representativos de Sevilla por los que podemos hacer un recorrido:
Rectorado de la Universidad de Sevilla. Se trata de la Real Fábrica de Tabacos, la primera que se estableció en toda Europa. Se construyó en el siglo XVIII y tiene aires renacentistas. Es uno de los edificios monumentales más grandes de España y desde mediados del siglo XX, alberga la sede del rectorado de la Universidad de Sevilla. En este lugar trabajaba Carmen como cigarrera y fue Don José la vio por primera vez en un cambio de guardia.
Callejón del Agua. Es una de las calles más significativas del emblemático Barrio de Santa Cruz. Linda con una de las murallas que salvaguardan los jardines de los Reales Alcázares. A través de la muralla circulaban los tubos que conducían el agua hacia los jardines. De ahí viene su nombre. En esta calle era donde Carmen bailaba.
Puerta de Jerez. Era una de los antiguos accesos a la ciudad a través de la muralla. Conducía hacia el camino que se dirigía a Jerez de la Frontera (Cádiz). Aquí desembocan la Calle San Fernando y la Avenida de la Constitución. En ese escenario es donde Carmen tiene una pelea con las cigarreras.
Real Maestranza. La plaza de toros de Sevilla es una de las que tiene mayor tradición taurina de toda España y es apodada como la ‘Catedral del Toreo’. Se construyó el 1733 en madera, en el monte del Baratillo. Tiene una capacidad de casi trece mil localidades. Alberga también el Museo Taurino y los alrededores se erigen estatuas de toreros muy reconocidos como Curro Romero. Aquí es donde Don José, preso de los celos de ver a su amada con el torero Escamillo, mata a Carmen de una puñalada.
Paseo de Colón. Aunque en este lugar no es representativo ni en la novela ni en la ópera, es donde se encuentra el monumento a Carmen ‘La Cigarrera’. Se trata de una obra del escultor Sebastián Santos Rojas, fechada en 1973, realizada en bronce.
